No obstante en la información hacen mención a las declaraciones de todo un premio Nobel que se queja de estas prácticas y de otras similares que suelen utilizar las compañías farmacéuticas para bloquear las investigaciones que culminarían con la curación de las enfermedades y potenciar las que fomentan la cronificación, lo que redundaría en la venta una y otra vez de sus productos.
En síntesis, la noticia nos habla de que investigadores médicos de la universidad de Alberta en Canada han desarrollado con éxito un método para acabar definitivamente con las células cancerígenas en las celulas, dejando a salvo las sanas. Para ello usan una sustancia denominada dicloroacetato que no requiere patente, por lo que la farmaceútica que promueve la investigación no obtendría ningún beneficio.
La imagen del dicloroacetato actuando en células cancerígenas la encontré en La Vanguardia.